El cabello ondulado es una de esas tendencias que no suele pasar de moda y que, si cuidas bien de tus rizos, te harán merecedora de piropos cada vez que sueltes tu melena. El problema está precisamente en ese punto: ¿cómo debes cuidar -y potenciar- las curvas naturales de tu pelo?

Hace algunos meses leí un interesante artículo sobre el daño que hacen los productos industriales que usamos diariamente, tanto a nuestro cuero cabelludo como a la hebra en sí. Me impactó y continué una pequeña investigación hasta llegar a una receta más bien curiosa de un gel natural cuya base era nada más y nada menos que la linaza.

La linaza es la semilla del lino (Linum usitatissimum) y es una pequeña muestra de la naturaleza se caracteriza por su versatilidad con usos tan variados que van desde la extracción de aceites ricos en Omega (3, 6 y 9), hasta la fabricación de pinturas de linóleo. Según muchos, sus beneficios nutricionales la colocan dentro de la categoría de “superalimentos”. Aunque hoy sólo te contaré de uno de sus usos estéticos.

La receta que encontré utilizaba extracto de semillas de toronja o romero como conservante natural para alargar la vida del gel, pero por la ausencia de éstos yo me fui con una versión más básica cuyos ingredientes eran dos: agua y linaza.

Para hacer el gel debes colocar las semillas de linaza a fuego medio en un recipiente con agua, aunque las proporciones dependerán de qué cantidad quieras hacer, te diría que puedes probar como punto de arranque con 2 cucharadas grandes de linaza y 500cc de agua. El tiempo de cocción suele ser entre 5-8 minutos y te sugiero removerla cuando notes que ciertas zonas se van “cuajando”.

¿Cómo sabrás que está listo? Cuando la mezcla tome la textura de una clara de huevo. Ojo: debes dejar que sea ligero pues cuando se enfría adquiere una consistencia más sólida.

Una vez preparado, este gel se aplica sobre el cabello húmedo, cubriéndolo totalmente y aportando una muy buena fijación al cabello. El resultado son rizos definidos con un brillo espectacular y una apariencia muy saludable.

  

El resto del gel lo puedes guardar en la nevera por hasta 5 días y utilizarlo para “retocar” todas las mañanas las partes del cabello que adquirieron frizz desde el lavado.

Algo que he podido observar es que la linaza marrón ofrece una mejor fijación que la dorada y que, una vez aplicado, el poder fijador se “re-activa” al humedecer un poco el cabello.

Yo tengo unos 6 meses usando esta receta como método para mantener mis rizos definidos, por lo que desde la voz de la experiencia te invito a intentarlo y dejar descansar a tu cabello de los dañinos químicos que suelen incluir los productos industriales.

¡Ya me contarás como te fue en el experimento!

(Comparto esta foto que me hizo el fotógrafo Pedro Bonilla en un evento musical como muestra del resultado del uso del gel natural de linaza).